Este
es un interesante articulo ,de Alejandra marroquin,sobre la
importancia de factores como la presentación personal y
lo que ella proyecta a nivel de las empresas, el cómo
se escala y en ello es de suma importancia la
imagen que se proyecta:
Cuando
tengo una plática con alguna organización que está interesada en comunicar a su
equipo la importancia de transmitir un mensaje determinado nos topamos con el
reto de que hay muchas personas que rechazan la idea de poder transformar su
imagen. Hay que saber transmitir por qué es importante hacerlo si no, es
muy probable que haya personas que sientan que esta idea es impuesta y sin
razón o fundamento.
Todos
tenemos un propósito, a veces es necesario que alguien más nos ayude a
definirlo, a veces aún cuando ya lo tenemos claro no sabemos como
comunicarlo. Lo que es muy importante, es que para lograr proyectarlo hay
que saber transmitirlo correctamente. A través de la imagen que
proyectas como profesional, las personas pueden percibir: Quién eres, cuánto
ganas, qué puesto tienes, a dónde quieres llegar.
Esto
no quiere decir que tengas que cambiar tu esencia o lo que eres. Es importante
estar de acuerdo en aceptar los requisitos que te pide tu empresa para que en
conjunto se proyecte un cierto mensaje, y demostrar tu interés por
participar y formar parte del equipo.
Así
puedes matar dos pájaros de un tiro, no sólo ayudas a proyectar la marca
corporativa, también reflejas a través de tu apariencia que eres un
profesional. La credibilidad que proyectas a través de tu imagen, determina
también a dónde quieres llegar. Dejar de demostrarlo, quizá mande una
señal que no te interesa crecer y que quieres quedarte cómodamente en dónde
estás.
Si
eres una persona con mucha capacidad y tu forma de vestir no lo demuestra,
quizá batalles en que otros crean que tienes este alto potencial. Si te acaban
de promover o estás buscando que te promuevan, la falta de vestir
apropiadamente para ese puesto que tanto quieres, pueda afectar este
crecimiento.
Si en
tu organización, se decide transmitir un cierto mensaje como marca corporativa,
esperan que su equipo participe para lograrlo. Por ejemplo, si quieren reflejar
que tienen prestigio y que son exitosos, y la gente del equipo se viste de
tenis, jeans o flats, quizá desde afuera nadie perciba ese mensaje. Aun cuando
el trabajo sea muy eficiente y la gente muy capaz, el objetivo final no se
logre por la falta de vestir adecuadamente.
Hace
muchos años, una amiga foránea estaba buscando una escuela para sus hijos, y la
forma en que ella decidió empezar a hacer una selección, fue pararse afuera del
colegio y ver salir a los alumnos para darse una idea de cómo era la comunidad
y si eso quería para sus hijos. Independientemente de que después evaluar
el nivel académico, su primer filtro era lo que pudo percibir a través de la
apariencia de los niños al salir de la escuela.
Eso
pasa en todas partes, las personas nos hacemos criterios de quiénes somos y qué
hacemos solo por ver nuestra apariencia. Pretender que tu forma de
presentarte a trabajar no tiene nada que ver con tu capacidad, es demostrar tu
falta de visión de lo que puedes lograr si transformas un poco tu forma de
vestir en lo profesional.
Cuando
la experiencia te enseña que ese no es el camino adecuado, quizá sea ya más
tarde, pues perdiste muchas oportunidades o te tardaste mas tiempo en alcanzar
el nivel a dónde quieres llegar. Esa rebeldía que te dice que tu puedes sólo
contra el mundo y lo vas a demostrar a través de tu propio estilo, pueda hacer
que se frene tu desarrollo. Entonces, te pregunto, ¿Quieres detener tu
crecimiento profesional o quieres demostrar tu alto potencial de liderazgo?
¿Qué estás esperando?
No hay comentarios:
Publicar un comentario